lunes, 29 de septiembre de 2014

Decir o no palabrotas

Me está pasando una cosa curiosa: cada vez digo menos palabrotas en público y más en privado. Me muevo entre niños, alumnos y profesores, casi todos mujeres, y me obligo a mí mismo a hablar ante todos ellos como un caballero, pero, cuando me encuentro entre amigos varones o solo, suelto mis palabrotas… Y hay algo ahí que me asusta un poco.

No sé qué es mejor: reprimirlas una y otra vez en la idea aristotélica de que el hábito hace la virtud o reprimirlas en lo público y darles rienda suelta en lo privado.

He visto varios casos de personas cercanas que, llegadas a la vejez o a la enfermedad senil, se vuelven palabroteras y blasfemas, ellas que lo máximo que decían era «¡Maldita sea!». En cuanto su voluntad de ser damas o caballeros comenzó a flaquear, les salió el villano que tenían dentro.

¿Estoy yo alimentando a ese villano con cada taco que suelto y, cuando me flaquee la guardia de la voluntad, él tomará mi cabeza como la plebe tomó la Bastilla? Y si me reprimo siempre, ¿no me saldrá tanta represión por la culata? ¿Debo cuidar mi lenguaje incluso cuando esté solo como si me estuvieran contemplando todos los ángeles del Juicio Final?

Lo que está claro es que no quiero convertirme en un viejo malhablado. Los viejos, si no son agradables, son doblemente desagradables.

¿Cómo gestionáis vosotros vuestro palabroteo?

lunes, 22 de septiembre de 2014

Aforismos

1. No planifiques tanto. Deja que Dios te sorprenda.

2. No hay que tocarlo todo ni comérselo. Gózalo con los ojos y que vuele.

3. Pedir disculpas te da siempre la razón.

4. Si un símbolo pasa de moda, no era un símbolo

5. Yo no quiero ser inmortal. Lo que quiero es no morir.

6. Tras hacer el amor, lo que queda es el amor ya hecho.

7. Nos queremos porque, antes de morir, eso es lo mejor que se puede hacer.

8. El que confía en sí y en los demás quiere libertades y el que no, derechos.

9. Cuantos más derechos tengo, más obligaciones tienes.

10. Cuando la adicción es más fuerte que tu voluntad, solo te puede salvar algo más fuerte que tu adicción.

viernes, 19 de septiembre de 2014

Cachorros y bebés

Ahora que se habla de que las perras tienen hijos y no cachorros o crías, pero se habla de fetos humanos y no de bebés, me han llegado tres anécdotas muy significativas de lo que está pasando en el mundo.

Una madre de cuatro niños va por la calle con ellos, uno de ellos en carrito, y su perra, y una mujer se detiene a hacerle carantoñas a la perra y pasa de los niños.

Esa misma madre fue al banco de un parque a sentarse para darle el biberón a su bebé, pero los otros tres niños no se pudieron sentar porque he aquí que otra señora y su perro ocupaban la mitad del banco. ¿Creéis que esta mujer le dijo al chucho que quitara su asqueroso culo de un banco hecho para personas? ¡No, su perro tenía los mismos derechos que los niños!

Y la tercera la presencié yo en misa. Una señora entró con un perro enorme que ocupaba con su panza un banco entero y, cuando llegó el momento de dar la paz, se la dio primero al perro haciéndole todo tipo de fiestas y luego a mí con menos fiestas. Al final de la misa, ella fue a encender una vela, mientras su chucho se bebía el agua de la Virgen.

Mientras los perros y demás animales ganan derechos que no necesitan, el no nacido pierde los que son suyos.

Desde luego, si al final pierde las elecciones este gobierno que había prometido reformar la actual ley del aborto y ahora la mete en un cajón por miedo a perder votantes, no seré yo quien lo lamente.

martes, 16 de septiembre de 2014

Sueños eróticos

Leo en un artículo de la Interred un catálogo de posibles sueños eróticos con sus supuestas explicaciones. Si usted sueña que se acuesta con el vecino, no es que lo desee a él, sino que seguramente desea el trabajo de él o su simpatía o algo por el estilo, pero no su cuerpo, no, por Dios.
Si usted sueña que tiene sexo oral, es que desea comunicarse más vivamente. ¿Que se lo monta usted con su ex? Es que está insatisfecho con su vida actual. Y si usted se lo monta a solas, significa que necesita cuidarse. Y así todo: ningún sueño erótico tenía como causa a Eros, sino factores nada eróticos y bastante aburridetes.

Pero ¿no podría ser que la mayoría de esos sueños se tengan sencillamente porque uno tiene ganas de jugar a los médicos?

Por cierto, vuelvo a recomendar el Almanaque de alacranes. Cumple muchos requisitos: es cotidiano, breve, ingenioso, claro y punzante.


domingo, 14 de septiembre de 2014

El poema de la semana

Amigos, llevo cosa de un año enviando a mis amigos un poema semanal escogido casi siempre de entre poetas contemporáneos, ya estén en este mundo o en el otro.

El de este domingo he decidido colgarlo también en este cuaderno. Y ya veré si lo convierto en sección fija.

Si alguien quiere recibirlo en su correo privado, puede enviarme su dirección a la dirección de correo electrónico que figura en el perfil de este cuaderno mío.

He aquí el texto que he enviado.

Inauguro el curso con este poema que aborda la gran cuestión del origen de todo. El poeta intenta explicarlo y, durante la explicación, todo resulta comprensible, pero el final, la meta, sigue envuelta en el más absoluto de los misterios (a no ser que el último verso no sea una ironía).

Me alegro, amigos, de que, después del verano, no os hayan catasterizado y sigáis aquí pisando la tierra con vuestros pies para recibir, entre otras cosas, este poema semanal.

Día de la creación
El día de la creación no pudo ser creado directamente
Primero había que crear algo, cualquier cosa, que lo precediese
Entonces fue creada —supongamos— la trompeta de jazz
Que a su vez fue precedida por el músico
Que a su vez fue precedido por su padre y su madre jóvenes y juntos dentro de un Fiat 1930
Que a su vez fue precedido por un camino
Que a su vez fue precedido por un bosque
Que a su vez fue precedido por lo que sea que lo precedía
—la tierra, el eje, la galaxia o las enanas blancas—
La verdad es ésta: la creación sucede marcha atrás.

Así se comprende todo perfectamente.
(De Luis Arturo Guichard)

miércoles, 10 de septiembre de 2014

El suicida y su ángel

Mi corazón está con el de todos los suicidas desde que de niño veía entre las fotos familiares el retrato de un hombre joven que, como me explicó mi padre, era un amigo suyo que se suicidó.

Creo que aquello me impresionó tanto porque ya por entonces oía yo una especie de voz, que no era sino una sugerencia loca, pero persistente, de mi imaginación, que, al asomarme a un barranco o al ver una soga o un cuchillo, me susurraba: "Ahora, Jesús, ahora es el momento. Fíjate qué fácil".

Por fortuna, los niños aprenden, gracias a los ángeles, a distinguir entre lo bueno de la imaginación y lo malo antes que a hablar, y el mío no solo me enseñaba eso, sino que además me apretaba contra su pecho cálido y fuerte. Lo recuerdo bien. Y siempre me salvaba.

A él el suyo no lo pudo salvar.

Qué tristeza tuvo que invadir al ángel del suicida no solo por no haberlo podido salvar de la muerte, sino sobre todo por no haberlo podido salvar de la tristeza que lo había matado por dentro antes de que el cuchillo, la soga o el barranco lo hubiera matado por fuera.

Por él enciendo hoy otra mariposa.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Mariposas encendidas

Cuando alguien va a Grecia, le encargo que me traiga mechas para mis mariposas de aceite, que cada vez es más difícil encontrar en España.

Siempre tengo una vela o una mariposa encendida en casa a la Virgen.

Me ha dicho un amigo que mis velas le están ayudando mucho. Me hace muy feliz pensar que ofrecer mi ayuda no es lo único que puedo hacer por alguien, sino que, además, puedo rezar. Eso extiende mi ayuda hasta extremos que yo ni puedo sospechar ni soñar. Con que solo exista una posibilidad entre un millón de que exista Dios y atienda a mis plegarias, vale la pena llenar mi casa de mariposas encendidas que las lleven a las manos de la Panagía, de la Toda Santa.

Si Él no me escucha, ya me escuchará Ella.


martes, 2 de septiembre de 2014

Las flores y el bombero

Hoy iba por la calle con un ramo de nardos y rosas rojas y me paró un bombero por la calle y me dijo: "¡Suerte! Que tenga usted mucha, que ya es difícil" y se despidió con esa sonrisa de complicidad entre hombres.

Y la verdad es que he tenido mucha, mucha suerte, si podemos llamar suerte a las mercedes recibidas, al amor, a la gracia.

Gracias a las flores y al bombero.

lunes, 1 de septiembre de 2014

El mejor de los placeres veraniegos

De todos los placeres del verano me quedo con este: flotar desnudo y de noche en la piscina mirando a las estrellas.

Es un placer no solo porque el agua y la desnudez se hicieron la una para la otra, sino porque en ese templo de las estrellas sobre el agua es natural y fluida la conversación con Dios.

Vengo, pues, con muchas ganas de charlar con vosotros y de contaros lo que me han contado las estrellas.

La primera es recomendaros el blog de mi hermano Daniel: Almanaque de alacranes, donde cada día colgará un punzante epigrama para despertarnos.

Un abrazo a todos