lunes, 15 de marzo de 2010

El ritual de la sandía

La sandía es un fruto delicado ideal para reuniones distinguidas, por ejemplo, una barbacoa en pleno campo. Propongo, pues, un día de campo para los blogueros, con la sandía como guinda final.

La sandía ha de ser portada por el bloguero con más bíceps y la debe sostener en alto mientras alguna bloguera, o bloguero, en edad núbil suspira con las manos enlazadas y pestañeando con sus pestañas postizas y con boquita de piñón.

Después se la deben pasar como un balón unos blogueros a otros, con la gracia de unos bailarines griegos, mientras improvisan hexámetros al estilo homérico. Una vez puesta sobre la mesa, el bloguero con más entradas la abrirá de norte a sur con un cuchillo de matanza y la sandía, si es bien nacida, debe rajarse con un chasquido y mostrar su prieta rojez en su interior.

Déjense ustedes de cuchillo, tenedor y plato. Lo refinado es repartir las tajadas y que la sandía chorree mangas abajo mientras uno escupe las pepitas en el rodal de hule que a cada cual le corresponde. Es de muy mala educación escupirlas en el rodal del otro comensal. También es de buen tono competir a ver quién arroja más pepitas dentro del cubo de la basura, para lo cual una persona, designada por el Ministerio de Igualdad, irá recogiendo con una bayeta las que caigan al suelo.

Por supuesto, el corazón de la sandía será entregado al niño más mimado de la reunión, para que este lo mordisquee y diga: No me gusta. Y se lo entregue a las hormigas y a las avispas.

Una vez la sandía dentro de nuestros estómagos, se puede proceder a un concurso de eructos y, después, a una siesta de ronquidos y belfos repicando.

A este día lo llamaremos la Apoteosis de la Sandía.

25 comentarios:

Jose dijo...

Jajaja...

Eso es empezar la semana de manera apoteósica, y lo demás...

Que tengas un muy leve y feliz día, Jesús...

Un abrazo.

Retablo de la Vida Antigua dijo...

El artículo es de antología. Me parece sensacional.

Además, estarán ustedrd de acuerdo con las siguientes apreciaciones:

1. Cuando cortamos una sandía para mucha gente todos ponemos, un poco, cara de reyes homéricos o de magnates medievales, dispensadores de abundancia. Es lo que nos queda del arte cisoria.
2.Damos al mismo tiempo muchas órdenes.
3. Casi siempre, entre los beneficiados por el reparto, suele haber algún catador que, en los primeros segundos, que pronuncia un dictamen, generalmente inapelable, sobre la calidad de la pieza.

Vale.

eres_mi_cruz dijo...

podemos invitar a esa señorita que parte sandías
a tetazos... aunque no sé si es bloguera y a lo mejor nos corta un poco el punto...

mejor invitamos a la Volpina...

Dyhego dijo...

Don EPIFANIO:
¡Mientras la "sandía" no nos vuelva "sandios"...!
1 neutonio con la manos pringosas y churretosas de melón de agua, hala.

lolo dijo...

Cómo me ha gustada esta entrada Cotta.
Voy a aprovechar para darte las gracias por poner un poco de cordura traviesa en mi pc.
Y mucha primavera.

Juan Antonio González Romano dijo...

¿Dónde hay que apuntarse? Yo leeré el soneto de la sandía de Salvador Rueda:
Cual si de pronto se entreabriera el día
despidiendo una intensa llamarada,
por el acero fúlgido rasgada
mostró su carne roja la sandía...

Un abrazo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Jose, gracias. Si no empezamos los lunes con alegría, habría más suicidios. Recibe tú también mi saludo.

Gómez de Lesaca, me encantan estas tres glosas tuyas. Qué bien traído eso de la cara de rey medieval y del arte cisoria y del dictamen inapelable. Un abrazo.

Don Dyhego, si la sandía es buena, bienvenido ese apretón de manos. Un neutonio sandiológico.

Lolo, me alegro mucho de de dar un poco de chispa a tu ordenata. Para eso estoy. Un beso.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Juan Antonio, ese soneto de mi paisano siempre me gustó y me acuerdo de él cada vez que se abre una sandía. Un abrazo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Eresmicruz, sí, mejor a la Volpina, después de verlas a las dos gracias a ti (¡que tienes enlaces para todo!). Pero me temo que la reunión se nos desmandaría un poco. Un abrazo.

Las hojas del roble dijo...

¿Pero pepitas ya masticadas que salgan del estómago impregnadas de jugos gástricos? Pffff, qué asco

José María JURADO dijo...

Sandías canora
coloradas y a su hora

:-)

Jesús Cotta Lobato dijo...

Hojas, no quería decir eso, pero ahora que releo la entrada me doy cuenta de que he puesto mal los tiempos. Ahora lo cambio.

José María Jurado, es que me va a mí esto de los encuentros y las propuestas, pero sé que en cuanto empiece a degenerar me darás un toque.

AdP dijo...

Es mi fruta favorita. Bueno, en realidad es una de las pocas que me gustan; pero sí, es mi favorita.

Me gustaría introducir cierta variante que consiste en practicar a la sandía un orificio en su parte superior, lo suficientemente grande como para que podamos vaciar su interior, y lo suficientemente pequeño para que no se nos convierta en una copa de balón. Procédase posteriormente a su relleno hasta la mitad con hielo y, a partes iguales, con ron añejo y refresco de cola.

Post scriptum: No es un objeto decorativo, hay que bebérselo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

AdP, ¡eso hay que probarlo! Suena exquisito. Gracias. Ten por seguro que lo probaré.

Mery dijo...

¡Y las ganas de hacer pis que entran después!
Menuda escena tan pintoresca.
Un abrazo

Juanma dijo...

Joder, Jesús, y a mí que casi que no me gusta la sandía. Ya sabemos que hay gente pa tó, ¿no?

Bueno, yo me tomaré un tintito mientras procedéis con el ritual.

Abrazos.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Mery, luego se puede proceder a un concurso de pis.

Juanma, mientras nosotros nos atiborramos de sandía, tú brindas por nosotros.

elpiyayo dijo...

Cosas que tu desconoces de la sandía:
Lo más hermoso que hay, es darle una "tajá" a un hijo varón en pleno verano, de sandía madura, pero no "aviná", larga y "bien cortá". El niño varón, desnudo, y verlo disfrutar, y ver caer sus "chorreones" " por su pichilla"(futura p..ya) abajo. Con las niñas es como que es "otra cosa"
pero cuidado con los tabarros, que pueden convertir un petardo en un misil "tomajaus", eso lo he visto yo.

Anónimo dijo...

Respecto al enlace "a tetazos", deconocía yo a mis 50, que habia tetas tan...., sufridas, con lo fragiles, cuidadas, hermosas que son, como pueden+ hacer eso, y uno no poder moderlas en un rapto de furiosa necesidad.¡Ah¡ su marido tiene setenta años, por lo tanto no puede tener dientes, los tendrá en un vaso en su mesita de noche, eso si, dormirá entre nubes que ahogan.
Yo, soy tu hermano el que de vez en cuando se hace anónimo por no dejarte mal.
P.D. En el puto corte inglés no está tu libro "A merced de los pajaros" .Como aún no tienes premio Planeta, ni Cervantes por eso será.
Pero si yo te asesoro y haces caso sin rechistar, tu escribes lo que yo te diga y tendrás tu premio Planeta, luego lo compartiremos en Costilla o en los Manjones.
Es facil, tu escribes bien, la idea la ponemos a medias, nos metemos un poquito con la Iglesia Cátolica, defendemos un poquito a los musulmanes y tiramos de los pelos a Rajoy, Esperanza y Aznar, al PSOE ni tocarlo que nos descalifican.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Piyayo, yo nunca podré experimentar ese placer porque no tengo hijos varones. Pero comprendo que debe dar cierto gusto. Eso sí, siempre que el niño sea un encanto. Un abrazo.

Alejandro Muñoz dijo...

También me apunto... y que vaya esa chica... si a Juanma no le gustan las sandías no podrá quejarse de la falta de melones.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Anónimo, todos nos hemos quedado atónitos con la de los tetazos. Tienes toda la razón en lo del marido. En El corte inglés tienen mala sección de poesía, según me han dicho. Yo te llevaré un libro de poesía mía. De veras pensé que te había dado ya uno. Se ve que se lo di a tu hijo. Un abrazo muy grande y me pensaré lo de tu proyecto.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Alejandro, lo malo es que sólo habrá dos melones y yo también me apunto y somos tres. Un abrazo.

Alejandro Muñoz dijo...

Sois dos Jesús. Prefiero la sandía, no quiero atragantarme.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Alejandro, te alabo el gusto.